lunes, 22 de junio de 2009

LA MOLECULA VIAJERA




La historia de las ciencias demuestra que el desarrollo de una ciencia no solo depende la genialidad de los investigadores o cientificos, si no de la existencia de un horizonte teorico comun que permita el entendimiento y asimilacion de las ideas; y tambien enseña que, algunas veces, muchos de los descubrimientos cientificos quedan fuera del entendimiento comun.
En la historia de la genetica tal es el caso de Mendel, cuyas leyes quedaron en el olvido o desconocimiento durante cerca de 40 años, en espera de un ambiente cientifico que permitiese su asimilacion a principios del siglo xx. A partir de su reconocimiento universal, el mendelismo constituyo la piedra angular de la genetica moderna. Otro caso similar es el de Barbara McClintock, quien en 1948 descubrio un fenomeno genetico hasta entonces inimaginado: la transposicion o movilidad de los genes dentro de los cromosomas. A pesar de que sus estudios pasaron inadvertidos para la comunidad cientifica del momento durante casi 30 años ( en la segunda mitad del presente siglo, el florecimiento de la Biologia molecular ), la historia le hizo justicia cuando se le otorgo el Premio Nobel en Fisiologia y Medicina en el año 1983 por sus experimentos de los genes saltarines con la planta del maiz ( Zea mays ).
G. Carlos Castro M.